El tarot puede ofrecer una perspectiva que complementa la psicología y lo mismo al revés.
Aquí hay algunas maneras en que el tarot puede aportar luz a situaciones en que la psicología puede tener algunas dificultades en situaciones concretas.
- Reflexión personal: Las lecturas de tarot pueden fomentar la autoexploración y la reflexión, permitiendo a las personas examinar sus pensamientos y emociones de manera diferente.
- Conexión emocional: A veces, el simbolismo del tarot puede resonar profundamente en una persona, ayudando a desbloquear sentimientos o experiencias que podrían no estar emergiendo en un contexto terapéutico.
- Narrativa personal: El tarot puede ayudar a las personas a construir una narrativa sobre sus vidas, lo que puede ser útil para dar sentido a situaciones difíciles o confusas.
- Creatividad: La interpretación de las cartas puede estimular la creatividad y el pensamiento no lineal, lo que puede abrir nuevas vías para resolver problemas.
- Accesibilidad: Algunas personas pueden sentirse más cómodas explorando su vida emocional a través del tarot, especialmente si no están listas para la terapia convencional.
Sin embargo, es importante recordar que el tarot no sustituye la terapia psicológica. Y por otro lado acudir a una terapia psicológica no excluye una cosulta a los naipes. Cada enfoque tiene su valor y puede ser más o menos adecuado según la persona y la situación.